Carlos Izquierdo: Essere

La esencia del nuevo álbum de Carlos Izquierdo, 'Essere' (Oasis Iris, 2019), es la intimidad de la materia y del gesto, desde un piano y una cajita de música. La audición del disco desarrolla en el oyente una percepción lenta del fluir sonoro, a la vez que lo desplaza hasta el interior de las emociones, todo con calma. El movimiento de las partículas del aire vibrante, que nace de los pulsos percusivos, espaciados y afinados por los sentimientos, importa. La materia musical se vuelve espacio, y el espacio, vida.

Este trabajo denota un discurrir de talante observador, impregnado de delicadeza, que se integra en lo bello del momento presente: perdurar el instante para habitarlo, escucharlo, sentirlo.

Una delicia de obra, donde todo es tan puro, que adonde nos lleva el autor no es otra cosa que un regalo valiosísimo y de lo más preciado: el núcleo del sonido, su tiempo y su latido que nos recorren. Nos purificamos, además, embebiéndonos de frágiles destellos que se desprenden del centro emocional, como partes mínimas que resuenan en un todo que, sin miedo a la pausa ni al posible silencio, alcanza lo eterno.
(Sarah Vacher)